Por qué la actividad física es tan importante para la salud

Importancia de la actividad física

Como seres humanos, aunque hoy en día no lo parezca, tenemos una inclinación natural a ser físicamente activos. Nuestros cuerpos han evolucionado durante millones de años para moverse y salir a cazar y recolectar, haciendo de la actividad física una parte integral de quiénes somos como especie.

Sin embargo, en la civilización moderna, hemos olvidado la importancia del ejercicio y dejamos que se convierta en una tarea en lugar de un placer.

No necesitas tanta actividad física en realidad

La verdad es que la inactividad física (es decir, el sedentarismo) es un importante problema de salud pública y numerosos estudios muestran sus efectos perjudiciales en nuestra salud general.

De hecho, incluso la actividad física moderada (150 minutos a la semana) puede tener beneficios sustanciales, incluida la reducción del riesgo de mortalidad por todas las causas en aproximadamente un 30%.

Pero ¿qué pasa con los beneficios del ejercicio que van más allá de la salud física? Los estudios han demostrado que hacer ejercicio 150 minutos a la semana puede disminuir el riesgo de cáncer de mama o de colon entre 30 y 60 % y el riesgo de padecer la enfermedad de Alzheimer entre 40 y 50 %. Y no nos olvidemos de los impactos mentales y emocionales en el bienestar general, incluida la mejora de la memoria y la concentración.

Programados para no hacer ejercicio

Entonces, ¿por qué nos resulta tan difícil hacer del ejercicio una prioridad? Una razón es que estamos programados para evitar la actividad física cuando no es necesaria para sobrevivir.

Nuestra tendencia natural al ahorro de energía significa que a menudo optamos por la comodidad en lugar del ejercicio, ya que implica esfuerzo. Por ejemplo, tomar el ascensor en lugar de las escaleras del supermercado. Para superar este instinto, debemos optar por realizar actividad física por motivos de salud.

Sin embargo, no hubo ningún momento en la historia de la humanidad, hasta hace muy poco, en el que uno pudiera estar sentado todo el día en una silla y no hacer nada físicamente. Nuestros antepasados tenían que salir y llevar a cabo actividad física. De hecho aun hoy en día el cazador-recolector promedio camina de 9 a 15 kilómetros diario. No hay vacaciones, ni fines de semana, ni jubilación.

Y eso hicieron nuestros ancestros por decenas de miles de años. Y sus ancestros por cientos de miles de años más. El problema es que en el mundo moderno la mayoría no necesitamos hacerlo para sobrevivir. ¿Entonces qué hacemos?

Hacer a la actividad física placentera

La clave para hacer del ejercicio una parte sostenible de su estilo de vida es encontrar formas de hacerlo placentero, necesario o divertido. Incorpora actividades que te aporten alegría y te hagan sentir bien, como salir a caminar o correr con amigos.

Y no tengas miedo de empezar poco a poco: incluso unos pocos minutos al día pueden tener importantes beneficios.

También es importante reconocer que el apoyo social juega un papel crucial en el mantenimiento de la actividad física. Tener amigos y familiares que compartan intereses similares puede ayudarle a mantenerse motivado y responsable.

Sostenibilidad antes que perfección

Finalmente, concéntrate en el progreso más que en la perfección cuando se trata de ejercicio y dieta. Comienza poco a poco y aumenta la resistencia con el tiempo. Recuerda que el objetivo es hacer que las decisiones saludables sean sostenibles, no perfectas.

Si estás list@ para comenzar a hacer cambios positivos en tu vida relacionados con la actividad física (y en consecuencia tu alimentación y otros hábitos), puedo ayudarte a comenzar. ¡Contáctame hoy para programar una consulta y dar el primer paso hacia una vida más saludable y feliz!

Referencias

Lieberman, D. (2021). Exercised: Why Something We Never Evolved to Do Is Healthy and Rewarding. Pantheon.

Lieberman, D., et al. (2021). The active grandparent hypothesis: Physical activity and the evolution of extended human healthspans and lifespans. Proceedings of the National Academy of Sciences, 118(50), e2107621118. https://doi.org/10.1073%2Fpnas.2107621118

Mattson, M. P. (2012). Evolutionary aspects of human exercise—born to run purposefully. Ageing research reviews, 11(3), 347-352. https://doi.org/10.1016%2Fj.arr.2012.01.007

Pontzer, H. (2019). Humans Evolved to Exercise. Scientific American. https://www.scientificamerican.com/article/humans-evolved-to-exercise/

Raichlen, D. A., & Lieberman, D. E. (2022). The evolution of human step counts and its association with the risk of chronic disease. Current Biology, 32(21), R1206-R1214. https://doi.org/10.1016/j.cub.2022.09.030

Descargo de responsabilidad: esta publicación tiene fines informativos únicamente y no debe interpretarse como consejo médico o nutricional personalizado. Consulta siempre a un profesional de la salud antes de realizar cualquier cambio en tu régimen de medicación o alimentación.

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